LA
MÚSICA
Cuando
cae la noche, entre murmullos de luna y susurros de estrella, la
magia se alza frente a mí en la nocturna esencia de la naturaleza
viva del universo...
Una
taza de té, bien caliente, me acompaña, un teclado, una pantalla
que me muestra mi moderno y actual cuaderno, lugar donde escribo mis
poemas, mis reflexiones, mis historias bañadas con el encanto de la
creatividad de mi alma, pero siempre, ligando cada frase, cada
palabra, a la insuperable seducción de alguna melodía engalanada con las más
bellas notas, sonidos que mi corazón atesora emocionado.
Todos
mis escritos, incluso los más antiguos, aquellos en los que un
bolígrafo o una pluma dibujaban con trazos largos y rápidos las
letras y vocablos que viajaban espontánea y fugazmente por mi mente,
en las hojas a cuadros de una pequeña libreta, iban al ritmo y
compás de la música que más me inspiraba.
Escribir...acto
que para mí está implícito en lo que soy, desde niña, cuando
inventaba canciones y poesías, historias de fantasía,
pensamientos...Era algo tan habitual en mí que jamás hubiera creído
que fuera especial, y sin embargo, era mi gran pasión. Tal vez eso
me haya demostrado que algunas veces obviamos cosas muy importantes
para nosotros por fijarnos con detenimiento en otras que nos llaman
más la atención, otras que no vibran como nosotros, pero nos
empeñamos en perseguirlas hasta alcanzarlas descubriéndolas después
como lo que son, un espejismo. Esto nos ocurre porque buscamos
siempre afuera lo que llevamos dentro de nosotros mismos. En mi caso,
siempre llevé alma de escritora, sencilla, humilde, aunque eso
realmente carece de importancia para mí, pues lo que realmente deseo
es permitirle a mi alma expresarse, y ella escogió esta manera de
hacerlo.
Mi
Ser, mi Yo Superior...mi amado Ser interior, mi propio guía, mi faro
de luz, parte de mí, me ha enseñado tantas cosas... Me reveló la
maravillosa capacidad de apreciar la magnificencia de la música y
sentirla dentro de mí, haciéndome vibrar con ella, entregada a su
suave sonoridad, transportándome a otro mundo, otra dimensión...
Mientras
percibo la música a mi alrededor, entro en la melodía, la siento en
mi piel...primero me acaricia lentamente, como si una fina capa
dorada me fuera cubriendo por completo, alterando mi ser, volviéndome
etérea, transparente, como si fuera sólo espíritu...Entonces, noto
que comienzo a ser sonido, nota, me entremezclo y me desmayo entre el
piano que suena y el violín que canta, y danzo alzándome en espiral
como mariposa hecha de partitura, de luces de colores brillantes y
chispeantes, y, como fuegos artificiales, exploto de emoción desde
mi pecho encendido...
Mis
lágrimas se derraman como gotas de lluvia forjada con la creación
de la divinidad... soy y me siento música...
Y
revolotenado feliz entre ráfagas de viento, torbellinos de amor,
vendabales de pasión emergente desde el sentimiento puro de la
gracia de sentirme ser algo tan lindo, viajo por los tiempos, en el
espacio en que se mueven las personas, que me escuchan sutilmente al
llegar...
Y
algunas saben apreciar la maravillosa experiencia de ser uno con la
increíble creación que algunos seres humanos imaginaron un día y
concebieron después...
La
imaginación de los soñadores es una gran y sublime creadora de
sueños que se hacen realidad...
Por
eso, hoy que he vuelto a ser música, en esta noche de inspiración
enamorada, reivindico mi deseo ferviente de seguir siendo soñadora,
defendiendo mi imaginación, mi fantasía, mi mundo mágico y
extraño, profundo como el océano... Nadaré en mi propio universo,
surcaré mi esencia, y mi alma continuará mostrándome su grandeza,
ante mi constante sorpresa...
Todas
las almas poseen un poder asombroso, pero no todas las personas están
dispuestas a averiguar cómo es de intenso lo que hay en ellas... Yo
sí lo hice, desde siempre, y lo sorprendente es que cada día
descubro algo nuevo sobre mí misma, cada día soy una mujer
diferente porque cada día estoy más unida a mi alma...
¿Qué
música suena dentro de ti?
Puede
ser el latir de un bolero, o de una pieza clásica, o tal vez el rock
sea el que vibre en tu alma, en un momento puedes ser violín, en
otro la voz de un saxofón, mañana puedes ser romanticismo, ayer
pudiste ser el hechizo de una melodía entrañable...
Yo
me quedo con todas...
SOY
LA MÚSICA QUE NACE DE LO MÁS PROFUNDO DE MI ALMA...
Arael...
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