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Los relatos del blog están divididos en varios títulos genéricos que son "Reflexiones", donde hallaréis escritos espirituales y reflexivos, "Una mirada al Alma" donde podréis leer historias muy profundas de crecimiento personal, del alma, "El Romántico Obsoleto", que cuenta con relatos de humor, irónicos, historias de la vida cotidiana del ser humano, "Diálogos", que son como la palabra dice, conversaciones que suelen ser muy profundas y espirituales, y por último he publicado tres capítulos de una de las novelas en las que estoy trabajando "Alma Cristalina". Disfrutad con todos ellos y compartidlos si os animáis a hacerlo para ayudarme a difundirlos.

Gracias por leerme, bendiciones a todos.

martes, 11 de febrero de 2014

VIVIENDO EN ESTE MUNDO

 VIVIENDO EN ESTE MUNDO

  REFLEXIÓN

Echar de menos, añorar, extrañar... ¿Qué significa en realidad?... ¿Significa querer tener algo o alguien cerca?...¿Significa que nuestro ego desea poseer ese algo o alguien, o tener el control de la situación?...

¡Cómo se siente en el corazón la añoranza, a veces sin saber bien qué es lo que se añora...!

Y esa tristeza que parece apoderarse de ti por momentos, ni siquiera tiene explicación, tan sólo es, está ahí, como una pequeña molestia que no consigues arrancarte, algo que se manifiesta de vez en cuando en ti...y te hace plantearte tantas preguntas...

¿Quién soy? ¿Qué hago aquí? ¿Dónde está mi compañero? Siento que vine con alguien, alguien que aún no está conmigo...

Después de buscar respuesta, después de meditar sobre ello y tras años y años sintiendo ese vacío que no puedes llenar con nada, te das cuenta de que tienes que hacer algo...

Y ves que buscando en el exterior no hallas nada, así que, comienzas a ir hacia dentro... Y ahí, ahí está esa pequeña porción de tu ser, tu alma, dentro de ti, diciéndote tantas cosas que habías olvidado...

Siendo ya algo más consciente de quién soy, aunque sin tener todos mis recuerdos activados, sigo caminando, y aún así, la añoranza continua... y a veces, una vocecita que proviene del cansancio y la fatiga de este caminar en este lugar tan inhóspito dice casi pasando inadvertida... "quiero irme a casa"....



Pero... ¿dónde está y qué es exactamente ese lugar al que llamo casa?...
Ahí queda esa pregunta sin respuesta, esa que hace eco constantemente en mi memoria, tal vez esperando a ser recordada en este camino donde lo olvidado está dejando de estar en el olvido para emerger como la verdad de mi ser, de mi alma...

Añoranza...¿la sientes? Es como un pálpito suave en tu corazón, que se expande fuertemente en ocasiones, y en otros momentos parece disiparse...
Ahora, dentro de este espacio mío, me transformo cada día más y más...
Y me hago cada día más preguntas...
Tal vez aún debo saber escuchar...

¿Escuchas tú el susurro de tu Ser?... Mi Ser, casi inaudible me responde en la medida en que mis cambios me permiten comprender...

Frente a mí misma me planteo qué deseo hacer en esta vida, sin importar mi edad, hace ya un tiempo que todo cambió en mi vida de manera bastante drástica, lo cual me impulsó con fuerza a depurarme, a realizar la gran metamorfosis que hoy me ha llevado a escribir todo esto.

Siempre creí que no había venido sola, que había alguien en algún lugar que era mi compañero, algo así como una persona cuya alma había encarnado para cumplir conmigo una misión de amor, pero no entendía bien qué quería decir todo aquello que sentía dentro de mí.
Era tan fuerte lo que había en mí, aquella certeza de ese ser que estaba en algún lugar, que podía sentir su llamada, podía percibir que también estaba sintiendo la mía, podía notar que ambos, cada uno a su manera, sabíamos que en algún momento nos encontraríamos.

Y así será, muy probablemente, pero dejé de esperar, dejé de buscar, ya no es necesario que lo haga, porque ya no necesito que aparezca frente a mí. Tengo la certeza de que llegará el momento en que, cuando ambos estemos completos, cuando ambos hayamos permitido a nuestras almas iluminarse, crecer, y hayamos tomado consciencia completa de quiénes somos y de lo que vinimos a hacer, todo el universo conspirará para que nos unamos.

Nunca entendí la manera en que se relacionan las personas, tantas amistades convenientes, tantas falsedades, hipocresías, traiciones, relaciones de pareja basadas en necesidades físicas o emocionales, alarde de privilegiados puestos de trabajo que permiten a unos sentirse superiores a otros y realizar actos que así lo demuestren...

Siempre creí que yo era la que no se adaptaba, la que no permitía que se relacionaran conmigo, la que se apartaba, pero, aun abriendo mi corazón a los demás, seguí sin entenderles.
Ser una persona segregada o rechazada nunca fue algo que me molestara, al contrario, me permitía acercarme a otros que eran como yo, para ofrecer mi amor, ¡qué ilusa!, ya desde muy joven creía que todos somos amor, pero realmente no en demasiadas ocasiones hallaba ese “amor” en los demás, pero sí encontraba desprecio, burla, o incomprensión... definitivamente no sabía dónde había nacido “¿qué lugar de locos es este?”

Jóvenes guerreando por ser los más populares, mientras otros detestaban el sistema y lo saboteaban como podían, tal vez con actos vandálicos, o intentaban huir de la realidad a través de las drogas, el alcohol, el sexo...

Otro tema que siempre me sorprendió, cómo no importaba nada con quién te relacionabas a través del sexo, algo que a mí me sugería un intercambio de mucho más que fluidos o de placer carnal, algo que yo percibía como el contacto de las almas, a través de la transmisión de la energía del uno y del otro, en un acto que trascendía el afán de la satisfacción individual, un acto que unificaba dos seres en una relación donde dos polaridades opuestas se fusionaban a través del motor del amor. Pero claro, yo era la rara, ellos los que sabían bien lo que hacían, experimentar, aprender, practicar, pero ¿desde el egoísmo puro y el instinto más animal del ser humano?... Tal vez yo era sólo una persona idealista que sólo veía la parte hermosa de ser un ser humano y me sorprendía comprobar una y otra vez ver cómo la bajeza se imponía, la bajeza vista sencillamente como actos que nacen de la inconsciencia total, actos que nacen de mentes dormidas, o de gente sin alma, tal vez...
Y en ese mundo de locos, yo era la loca, yo era la extraña, me pregunto realmente quién definió la cordura y en base a qué, porque si ser cuerdo es estar dentro de las normas establecidas de este sistema moribundo, dentro de este sistema corrupto y contaminado por la ignorancia y por los instintos más bajos del ego del ser humano, entonces yo no estoy cuerda, ¡para nada!.

¿Cómo se puede valorar a alguien por su aspecto físico, por su color de pelo, su color de ojos, su peso, su busto, su trasero, sus piernas, sus músculos, su manera de bailar o de hablar, ect...?
¿Qué hay dentro de cada ser humano? ¿Te has parado a preguntarte eso cada vez que conoces a alguien?

Realmente, pocos se tomaron la molestia en mirar dentro de mí, para ver quién había dentro de este receptáculo que es mi cuerpo físico, el cual envejecerá, como el de todos los seres humanos. Lo que está aquí dentro, eso es lo que soy, no mi pelo, ni mi aspecto, eso no es importante.

Al principo, este hecho me apenaba, era muy joven y no comprendía, porque yo tenía la mala costumbre de mirar a los ojos para ver quién había dentro de cada persona, y aunque yo era capaz de ver en profundidad, sabía lo más importante que tenía que saber, que su apariencia no definía a su alma.

Así que, echar de menos, añorar, extrañar...sí, porque sabiendo que el amor existe, el amor con mayúsculas, sabiendo que las relaciones entre nosotros podrían ser mejores y diferentes, sabiendo que incluso las parejas podrían ser inseparables si se unieran con responsabilidad y con el AMOR que les permitiera expandirse y ser dos seres conscientes y plenos amándose felices, sin miedo, sabiendo todo eso, no puedo dejar de añorar alcanzarlo...
Tal vez antes lo tuve, y por eso ahora lo extraño tanto...Seguro, porque lo estoy recordando...

Arael...


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